El pasado 29 de diciembre de 2015 manifestamos una enorme preocupación respecto de la puesta en marcha del Decreto 254/2015 que habilita la revisión de puestos trabajo en la administración pública nacional.

Más allá del rechazo a dicho decreto, en los últimos días lejos de proceder a la revisión, ya se han registrado masivos despidos en el ámbito del Estado nacional que también tuvo consecuencias en la Provincia de Buenos Aires y en otras del interior.

En el caso del Centro Cultural Néstor Kirchner ya son más de 600 las/os despedidas/os, en el Senado alrededor de 2000 y en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación se están viendo afectados los contratos de los talleristas del “Programa Argentina Trabaja” y las/os trabajadoras/es de “Primeros Años”. En el caso de este último se trata de 33 despidos de trabajadoras/es que vienen peleando por la conquista de la estabilidad laboral, conflicto que desde este Consejo Profesional acompañamos.

Consideramos que este atropello en los derechos laborales encontró una base en los procesos de precarización preexistentes. En esta situación se encontraba el 50% del colectivo profesional, panorama que se complejizaba con un 14% de desocupación (datos obtenidos en la encuesta realizada por este Consejo Profesional en 2014). En la actualidad, los despidos y la profundización de la precariedad laboral con los cuales se busca un ajuste del gasto público, impactan negativamente no sólo en nuestras fuentes laborales, sino también en la calidad de vida de la población con la cual trabajamos en el marco de políticas públicas que ven afectada su continuidad y calidad.

La eliminación y/o precarización de nuestras fuentes laborales vulneran sistemáticamente nuestros derechos como trabajadoras/es, el desarrollo de nuestras incumbencias profesionales y profundiza la precariedad de nuestras vidas.

En concordancia a la convocatoria del Colegio de Trabajadoras/es Sociales de la Provincia de Bs. As, invitamos a las/os colegas a comunicar cualquier situación que vaya en detrimento de su pleno ejercicio profesional o su fuente laboral.

Continuaremos articulando con organizaciones sindicales, sociales y políticas para hacer visible los reclamos y revertir esta situación. Convocamos a las/os colegas a que se acerquen a construir un Consejo Profesional que se consolide como un actor político que defienda la calidad de la intervención profesional, las políticas públicas integrales, las condiciones de vida de las/os trabajadoras/es y el pueblo.