¿Sorprendidas/os? ¿Indignadas/os? ¿Cuál es la sensación que genera ver cómo una y otra vez se vuelve a ubicar al Trabajo Social en la esfera de la ejecución de políticas públicas ligadas al control, restricción y burocratización de los derechos sociales?

Independientemente de la sorpresa o indignación que esto genere, nuevas prácticas ligadas a “apresar” nuestros derechos están presentes en las políticas públicas y ubican al Trabajo Social como una disciplina ligada al control y vulneración de derechos.


La obligatoriedad de la confección de la Historia Social para que pacientes oncológicos sin obra social accedan a la medicación, “la certificación” de la situación de pobreza para acceder a  un  medicamento o un estudio de alta complejidad médica y tantos otros ejemplos, que bajo la excusa de la escasez, profundizan la estigmatización de la pobreza, violan derechos ciudadanos y ubican a las/os profesionales de la salud en la mano ejecutora de lo que muchas/os autoras/es llaman “ciudadanía fragilizada” o de “baja intensidad”.

Hoy, ante el plan Qunita, programa de entrega de recursos que se implementará en la CABA en coordinación entre los Ministerios de Salud de este territorio y la Nación, vemos que se ubica a nuestra profesión en el mismo lugar, que resulta inaceptable. El flujograma propuesto para el circuito de la entrega establece, en la CABA, que el Servicio Social deberá “Recibir el listado de mujeres beneficiarias, Cargar la entrega del Kit a la base de datos SIIAArchivar comprobantes y Elaborar listado diario para elevar a la dirección del Hospital sobre la entrega del plan”

En este sentido desde la Secretaria de Asuntos Profesionales, y ante la solicitud de colegas,  queremos señalar que esto resulta violatorio de los Derechos Ciudadanos, y de nuestra legislación profesional. La Ley Federal N° 27072 y la ley de regulación de la profesión en la CABA N° 23377 enmarca nuestras prácticas profesionales en el marco de los Derechos Humanos, y éstos nos compelen a actuar en referencia al campo de la salud desde criterios de igualdad, equidad, universalidad y accesibilidad al derecho a la salud integral.

Nos oponemos como trabajadoras/es profesionales  a ser meras/os ejecutoras/es de políticas que nos ubican en tareas administrativas y en el control de recursos y llamamos al colectivo profesional a tomar un posicionamiento de rechazo frente a estas indicaciones. Como apoyo de esta pretendida acción colectiva, enviamos un comunicado (que adjuntamos) de parte de nuestra institución, que fue enviado al Ministerio de Salud y a las Direcciones de Hospitales con Servicios de Maternidad y Obstetricia del sistema estatal de salud de la CABA, y sostener así esta negación a nuestro atropello. Iniciaremos comunicaciones con el gremio “Asociación de Profesionales de Servicio Social”, con el fin de articular esfuerzos, como venimos sosteniendo en distintas temáticas relacionadas con las/os trabajadoras/es de la salud. Asimismo invitamos a enviarnos sus posicionamientos individuales, o colectivos, en torno a este tema, con el fin de fortalecer nuestro rol y coordinación de acciones.

Asuntos Profesionales.